1. Ese triste día, mi Jesús sufría
En la cruz clavado por nuestro pecado;
// Tiernamente dijo a Juan y a la madre:
¡He aquí tu hijo, he aquí tu madre!. //
2. Cuando le clavaban y le denostaban,
Imploró clemencia, perdón y paciencia
// En favor de aquellos que en tinieblas yacen,
¡Pues ignoran ellos!, dijo, ¡lo que hacen!. //
3. En su angustia, llama; !Sed yo tengo! exclama.
¡Y sabéis qué hicieron? vinagre le dieron.
// A aquel penitente que buscarle quiso,
Le ofreció la fuente de su paraíso. //
4. Con solemne calma encomienda su alma,
A su Padre amado que ya le ha dejado
// Por el vil pecado de un mundo errado,
Y clama angustiado: ¡Ya es consumado!//
5. ¡Cuán felices fuimos desde que creemos
En el Cristo amado que fuera inmolado!
// Fue a la tumba fría, y resucitado,
Un hermoso día fue glorificado. //