1. Padre, tu Palabra es
mi delicia y mi solaz;
Guíe siempre aquí mis pies, y a mi alma traiga paz.
Coro: Es tu ley, Señor, faro celestial,
Que en perenne resplandor,
Norte y guía da al mortal.
2. Sí, obediente oí tu voz,
En tu gracia fuerza hallé,
Y con firme pie y veloz por tus sendas caminé.
3. Tu verdad es mi sostén
Contra duda y tentación,
Y destila calma y bien
Cuando asalta la aflicción.
4. Son tus dichos, para mí,
Prendas fieles de salud;
Dame, pues, que te oiga a ti,
Con filial solicitud.
Pista
Estas letras son propiedad de sus respectivos artistas, autores y compositores, y están destinadas únicamente a fines de estudio privado.
LETRA: Juan Bautista Cabrera, 1914. MUSICA: John T. Grape, 1868.