1. Ved la fuente sanadora
La que abrió el Salvador,
Cuyas aguas refrescantes
Son de perennal valor.
CORO ¡Oh, preciosa fuente sanadora!
Para todos fluye libre;
¡Oh, preciosa fuente sanadora!
¡Gloria a Dios, me sana a mí!
2. En la fuente que nos sana
He hallado el perdón,
Y lavado toda mancha
De mi pobre corazón.
3. En la fuente que nos sana
Cristo ofrece la salud;
Pues venid, enfermos todos,
Probaréis su gran virtud.
4. Esta fuente que nos sana
Aun hoy día es eficaz;
Ven, sumérgete en ella.
Cree, y sano quedarás.
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