Amado Padre, Dios Todopoderoso, hoy comenzamos una nueva semana y siempre puede surgir la duda de que batallas tendremos que ganar.
Pero en cualquier circunstancia que tengamos que enfrentar, tu palabra dice que ganamos porqué Jesús es el único vencedor verdadero y no importa cómo va la batalla en este momento, ayúdame a recordar que somos ¡Vencedores! y ¡Ganadores!
En este día bendigo tu santo nombre y no olvido tu amor y ninguno de tus beneficios. Amén
Romanos 8:35-37
¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿La tribulación o la angustia, la persecución o el hambre, la desnudez o peligro, o la espada? NO, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.