Nuestra vida y lo que logramos está en las manos de Dios y sin su bendición no podemos lograr ninguna cosa. No podemos asegurar nuestro futuro, ni nuestra seguridad sin su protección y bendición.
Ayúdanos a reconocer que todos los logros y gloria dependen de poner nuestras vidas en tu cuidado. En ti encuentro refugio y en tu fuerza descanso para que mis días sean valiosos.
Salmos 62:7
En Dios descansa mi salvación y mi gloria; la roca de mi fortaleza, mi refugio, está en Dios.